¿Un coso taurino junto a la Puerta de Alcalá? No es un desvarío. Lo hubo durante más de un siglo (entre 1749 y 1874), en la calle de Alcalá, 75. Fuente de inspiración para Goya y cita obligada para los taurinos de la época, se alzó por deseo de Fernando VI. Con un aforo de 12.000 espectadores y 110 palcos, se inauguró en julio de 1749 y, hasta su cierre, acogió más de 2.500 corridas y las tardes de gloria de Cúchares, Lagartijo o Frascuelo. Hacemos un recorrido histórico con la guía del Plan Memoria de Madrid por la huella taurina de la ciudad.