La violencia en el deporte copa titulares en los últimos meses y se está convirtiendo en un tipo de conflicto cada vez más presente. Sus causas, sus caras, los modos de atajarla han centrado el debate de la mesa sobre Violencia en el Deporte, que ha reunido al ex seleccionador nacional de baloncesto, Pepu Hernández; a los atletas Alessandra Aguilar y Jesús España, y a los autores del libro Manual para padres, deporte y valores David García y Guillermo Calvo, bajo la moderación del periodista Jesús Duva.
Educación, inculcada en el hogar, actitud proactiva de instituciones y clubes, e implicación de los profesionales y deportistas son los elementos básicos de la receta para atajarla. Jesús España ha sido claro con su ejemplo. Al hilo del partido entre Madrid-Barça del próximo domingo, el atleta ha hecho un llamamiento a los jugadores de ambos clubes para no sacar la rivalidad del terreno de juego. “No hay que incitar a la gente a que tenga un grado de agresividad mayor. Por eso, desde los clubes, deberían dirigirles y decirles qué pueden y qué no pueden hacer. Deben asesorarles”.
Pepu Hernández ha señalado la importancia de la educación, empezando por la concienciación de los padres. Es importante que los menores vean el deporte como una actividad que les ayuda a autorrealizarse, no sólo inculcándoles la importancia de una vida saludable, sino también transmitiéndoles valores de respeto y compañerismo. “Muchos padres han presionado a sus hijos para que sean lo que ellos no pudieron ser. Esto implica una presión extrema en muchos casos para los menores, quienes a veces acaban rechazando por completo el deporte”, ha constatado el ex seleccionador nacional.
Hernández, quien ha criticado la pasividad de instituciones y clubes a la hora de tomar medidas ante este tipo de actos violentos, ha querido recalcar que “las leyes no sirven de nada si no hay educación. Las leyes nos ayudan, nos dicen por donde debemos ir, pero, si no hay educación, no hay nada”.
Implicación de los deportistas y los profesionales
Para Jesús España la actitud ejemplarizante ha de ir más allá del propio hogar. Los propios deportistas profesionales y clubes tienen mucho que decir, mostrando a la sociedad que la violencia no tiene cabida en el deporte. “Los deportistas de alto nivel tenemos una responsabilidad, ya que debemos ser ejemplares en nuestro comportamiento”, ha explicado el atleta. Dentro del colectivo, los “futbolistas tiene una responsabilidad aún mayor, ya que los chavales les copian y, si ven que un futbolista agrede a otros, los niños ven en ello algo que se puede hacer”, ha recalcado.
La atleta Alessanda Aguilar, por su parte, ha querido ir un paso más allá y hacer un llamamiento a “los medios de comunicación” dado que “en ocasiones sólo resaltan determinados aspectos como el corte de pelo de los jugadores de fútbol”, mientras que “a detalles de compañerismo o esfuerzo no se les da valor”. “Hay ciertos comportamientos que se ven como normales y que son agresiones. Hay frases y palabras que tienen mucha más relevancia de la que creemos”, ha concluido.
La mesa ha tenido lugar en el último día del I Foro Mundial sobre Violencias Urbanas y Educación para la Convivencia y la Paz, que desde el pasado miércoles ha recibido a más de 3.500 personas./