Si hay un lugar donde siempre está viva la memoria de San Isidro es en el Museo al que da nombre, que forma parte de la red municipal de museos. El Museo de San Isidro-Los Orígenes de Madrid ha evolucionado en estos años para ser la gran memoria de la historia de la ciudad hasta el siglo XVI, pero no ha dejado de lado su función de depositario de la memoria y la tradición en torno al santo labrador. Por ello, tras la reciente celebración del cuarto centenario de la canonización de esta figura tan vinculada a la ciudad, el centro efectúa su propio homenaje con la exposición ‘San Isidro. 400 aniversario de su canonización’. Esta muestra, que repasa no sólo la tradición en torno al santo sino también su legado cultural, estará abierta hasta el próximo 31 de mayo del año que viene.
El discurso expositivo de esta muestra se conforma con el siguiente recorrido: la casa de San Isidro (capilla, sacristía, patio y pozo), en la planta de acceso (aprovechando que la tradición sitúa la vivienda del santo en lo que hoy es el propio museo); las referencias que nos han llegado de su vida y sus famosos milagros, en la sala I; representaciones plásticas de las imágenes de San Isidro y su esposa, Santa María de la Cabeza, en la sala II; un repaso a la presencia de San Isidro como personaje en la historia, la literatura y las artes, en la sala III y un repaso a lo que es la fiesta de San Isidro, como festejo mayor de Madrid, en la sala IV. Se puede ver, asimismo, una zona dedicada al yacimiento de San Isidro en el corredor de salida.
Se exponen en total 190 piezas que pertenecen a diferentes instituciones culturales del Ayuntamiento de Madrid. Entre ellas destacan las procedentes de la colección del propio museo, tanto obras ya expuestas y conocidas por el público como nuevas adquisiciones que se exhiben por primera vez. A esto se suman cesiones del Museo de Historia de Madrid, la Biblioteca Histórica Municipal, el Archivo de Villa, la Hemeroteca Municipal de Madrid y la Biblioteca Musical Víctor Espinós, así como de colecciones privadas.
La obra expuesta es muy variada desde el punto de vista de la manifestación artística o documental (pintura, escultura, estampa, fotografía, documento, libro…). Como ejemplos, se pueden mencionar obras de Lope de Vega relacionadas con San Isidro, como el Poema Isidro, conservado en la Biblioteca Histórica; muestra de música propia de las fiestas patronales que atesora la Biblioteca Musical, importantes referencias a la festividad del Patrón y sus tradiciones que figuran en la Hemeroteca Municipal, el expediente de gastos generados por el proceso de canonización que se custodia en el Archivo de Villa o la obra de Bartolomé González San Isidro en oración, procedente del Museo de Historia.
El propio Museo de San Isidro, además del marco estético que forma la capilla con las pinturas de Zacarías González Velázquez, aporta numerosa obra artística como San Isidro y Santa María, un óleo sobre cobre atribuido al pintor barroco del siglo XVII Alonso de Arco. También puede verse un figurín de la película San Isidro Labrador, de Manuel Comba Sigüenza, ; un biombo de Víctor Cortezo, varias pinturas sobre zinc mexicanas que muestran la amplia extensión que ha tenido el culto de San Isidro o una medalla conmemorativa del III Centenario de la Canonización de San Isidro, emitida en 1922.